CANGAS DEL NARCEA.- Una osezna de ida y vuelta

osa jpg

 La osezna liberada a finales de noviembre en la reserva de Muniellos tras ser rescatada herida dos meses antes en los montes de Cangas del Narcea volverá a ser capturada por técnicos de la Consejería de Agroganadería tras haberse detectado su presencia en el núcleos urbano de Degaña.

Según ha señalado a Efe el presidente de FAPAS, Roberto Hartasánchez, el ejemplar ha sido visto durante varios días en las calles de Degaña y, pese a que algunos vecinos procedieron a espantarla, ha vuelto a aparecer aparentemente en busca de comida.

“Molinera” llegó ayer a Santo Adriano a las 19:22 horas de una tarde desapacible, lluviosa y oscura. Fue capturada a las 16:30 horas en Degaña y llevada por carretera hasta el cercado. Iba anestesiada en un remolque cilíndrico y aparatoso que hubo que alzar a pulso porque, al final, quedó atascado en una curva. Aquello no giraba, pero los técnicos se esmeraron hasta conseguirlo. “Molinera”, por lo demás, realizó el viaje sin problemas, “tranquila y sin dar guerra”.

El miércoles por la noche, la Consejería convocó a los expertos a una reunión urgente para el jueves por la mañana. Allí se comunicó la decisión: había que recogerla y trasladarla a Santo Adriano “de forma urgente” para atajar una situación de “riesgo impredecible”. Su comportamiento, explicó luego la Consejería en un comunicado, fue normal durante sus primeros 15 días tras su suelta en Muniellos porque “se dedicó a explorar el territorio y actuar con normalidad”. Pero el pasado 6 de diciembre inició una serie de aproximaciones a Degaña que “finalizaron con varios días de presencia continuada en jardines, huertos, aparcamientos, polideportivo, cementerio y en la carretera de la localidad, hasta el punto de deambular entre las viviendas”. En ese momento, la Guardería del Medio Natural entendió que era necesario “establecer una vigilancia permanente”. Así las cosas, los técnicos decidieron llevar a cabo una serie de medidas disuasorias para alejarla del pueblo. Inicialmente no fueron eficaces, así que el miércoles se optó por desarrollar un operativo con perros. Ese día, “Molinera” se fue a un robledal donde pasó la noche. Pero a la mañana siguiente, volvió a la localidad, hizo frente a los perros y mostró “un comportamiento mucho más agresivo”. Era ya un “oso familiar”, se paseaba por el pueblo sin miedo a los humanos.

osa 2

Entre el 1 de octubre y finales de noviembre la osezna permaneció en las instalaciones del Centro de Recuperación de la Fauna de Sobrescobio, donde evolucionó favorablemente de las dolencias de las que fue atendida en una clínica veterinaria de Oviedo.

Tras constatar que tenía ya un comportamiento normal, su peso alcanzaba los 29 kilos y contaba con buena movilidad, la Consejería optó por liberarla en las proximidades del lugar donde había sido recogida.

Según aseguró entonces la Consejería, la zona fue elegida porque permitía tener al ejemplar vigilado, había comida suficiente y zonas protegidas para invernar y encamarse.

La decisión de volver a capturar la osezna  fu comunicada por los responsables de la Consejería a un grupo de expertos sobre el oso pardo durante una reunión en la que FAPAS mostró su oposición a que finalmente el ejemplar sea trasladado al cercado que gestiona la Consejería y la Fundación Oso de Asturias en Proaza.

Según Hartasánchez, la Consejería no ha hecho todos los esfuerzos necesarios para reintroducir a la osezna en el medio natural y ha abogado por liberarla en una zona más aleja de los núcleos de población y en la que se le facilitasen alimentos para evitar que se acercase a pueblos al haberse acostumbrado a la presencia humana.

“Resulta evidente que la Consejería tiene “prisa” por conseguir un nuevo ejemplar de oso cantábrico que alimente el circo en el que se han convertido las instalaciones donde en la actualidad se encuentran los osos Tola, Paca y Furaco”, ha señalado.

Además, el FAPAS solicitará de la Consejería un informe sobre las condiciones en las que se ha mantenido a la osezna en cautividad dado que su comportamiento parece responder claramente a un cuidado negligente en cuanto a medidas de aislamiento, “impidiendo una recuperación acorde con los requerimientos que un animal salvaje necesita para ser devuelto a la naturaleza”.

Por su parte, tres organizaciones conservacionistas -la Coordinadora Ecoloxista d’Asturies, Asociación para la Defensa Jurídica del Medio Ambiente- ULEX y el Colectivo Ecologista de Avilés- han exigido responsabilidades por el “fracaso” del intento de reintroducción de la osa en su hábitat natural.

.Comparte en tus redes sociales
Share on Facebook
Facebook
Tweet about this on Twitter
Twitter
Share on LinkedIn
Linkedin
Pin on Pinterest
Pinterest
Share on Tumblr
Tumblr

R. Mera

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.