El TSJA condena al SESPA por “defectuosa asistencia sanitaria” en Cangas del Narcea
Nadie está exento de cometer errores y eso ha ocurrido esta vez en el Hospital Comarcal Carmen y Severo Ochoa cuyos profesionales, por otra parte, gozan de un merecido prestigio. Bueno es también si se comete el error reconocerlo así.
El Tribunal Superior de Justicia de Asturias ha condenado al Servicio de Salud del Principado (Sespa) a indemnizar a la viuda y la hija de un paciente del Hospital Carmen y Severo Ochoa de Cangas del Narcea, que falleció, según recoge la sentencia, por una “defectuosa asistencia sanitaria”, tras someterse a una operación.
Los hechos se remontan al año 2009, cuando J. I. A. A., de 45 años, contrajo, durante su ingreso, una neumonía hospitalaria que no se le diagnosticó. El fallo concluye que las complicaciones en el postoperatorio desembocaron en un cuatro séptico que “no se intentó localizar con las pruebas oportunas”, sino que se decidió una reintervención “innecesaria e injustificada”, que pone de relieve “una defectuosa praxis en el tratamiento a que se sometió al paciente”. El fallecimiento se produjo durante el traslado al Hospital Central de Asturias, tras las complicaciones surgidas.
La familia inició los trámites judiciales porque “los médicos no admitieron su error y la sentencia demuestra que yo tenía razón”, dice su viuda, quien señala: “No quiero darles una lección, solo que se sepa qué pasó, sin entrar en detalles que únicamente removerían nuestro dolor”.
El fallo se conoció en diciembre del 2012, y la sentencia ya es firme, después de que el Sespa no presentase recurso
