SUROCCIDENTE.- Una loa nacional al vino de Cangas y bodegas Vitheras
El diario El Independiente de pasado día 11 de diciembre publicaba un reportaje con el siguiente titular:”La supervivencia de la viticultura heroica asturiana; cuatro siglos de un milagro entre montañas”
Señalaba que “protegidas por el Macizo Galaico y la Cordillera Cantábrica, “las soleadas laderas de los profundos valles de Cangas del Narcea e Ibias son un lugar, de por sí, único.De allí surge un producto 100% asturiano, tradicional y familiar, que se cultiva mediante viticultura heroica y que lleva grabado con orgullo en su ADN la historia de la tierra que le vio nacer. Un auténtico secreto entre las montañas.
Y tras esta introducción general pasa a glosar Vitheras (Viticultores Heroicos Asturianos), “cuya tradición se remonta a 1556 y que ha conseguido convertirse en una de las empresas de referencia del sector en nuestro paísy cuya trayectoriasuscitó la admiración de personajes como Gaspar Melchor de Jovellanos, el Conde de Toreno, Suarez Cantón o el músico Anselmo González del Valle. Aunque el camino no siempre fue fácil.
Y como sucedió prácticamente en todo el concejo cangués en los años 50 del siglo XX en Carballo, a orillas del río Cibea que es donde Vitheas tiene su sede, se descubrió antracita. En pocos años, el paisaje de la zona se transformó por completo con la apertura de minas de carbón que hicieron que muchos de sus habitantes abandonaran la ganadería, la agricultura y los viñedos para dedicarse a la minería. Sólo unos pocos continuaron dedicándose a fabricar vinos. Entre ellos estaba Don Juan y su familia.
Los estragos de la Guerra Civil y las enfermedades de la vid terminaron por hacer que los viñedos de montaña cayeran en el olvido. Las cosas cambian con la llegada de los 80 del siglo pasado en que los viñedos comienzan a resurgir. Una canguesa científica del CSIC, María del Carmen Martínez Rodríguez, comenzó a investigar y a recuperar las variedades vitícolas autóctonas con la ayuda de los herederos de Don Juan. Ese duro trabajo se materializó en la creación de una nueva empresa en 2014, Vitheras, que se ha centrado en dar continuidad al proyecto familiar y profesionalizar la elaboración de vino.
Los valores familiares, la fabricación artesanal, los productos de excepcional calidad y el carácter asturiano han hecho que en los últimos años Vitheras se labre una reputación entre los paladares más exigentes del principado de Asturias, y entre los sommeliers y la gente especializa pertenecientes a la alta gastronomía.
Y die el periódico: “Sus botellas de vino, negro azabache, se han convertido ya en inconfundibles. Y tratan de reflejar la historia del producto y de la tierra. Por un lado, representando su exclusividad y calidad extrema. Y por otro, el color es una referencia a la antracita -un guiño a los vestigios de la minería-, al paisaje asturiano y al legado familiar de la marca.
Todo esto ha servido para que el vino Vitheras reciba la atención de numerosos restaurantes de alta cocina de toda la geografía española, que han querido incorporarlo a sus cartas. Algunos de ellos cuentan incluso con varios soles de la Guía Repsol y con estrellas Michelín. Es el caso de O’ Pazo (Madrid), Casa Gerardo (Asturias), Grupo Urrechu (Madrid), Alabaster (Madrid) o Ferpel (Asturias), entre muchos otros.
En la actualidad,la dirección de la bodega corre a cargo de la última generación de la casa de Don Juan, 3de su nieto: Carlos Ron Martínez
