Las importantes y ocultas carencias del Hospital Comarcal Carmen y Severo Ochoa
El Hospital Carmen y Severo Ochoa, el comarcal del suroccidente asturiano, pertenece al área sanitaria II y da asistencia a los ciudadanos de los concejos de Allande, Cangas del Narcea, Degaña, Ibias y Tineo, unos veinticuatro mil habitantes. Se inauguró en 1986 cubriendo la atención sanitaria de más de cuarenta mil personas en una de las comarcas españolas que más población ha perdido y está más envejecida. En un artículo recientemente publicado en La Nueva España por el que fuera bibliotecario municipal de Tineo, Santiago Pérez, denunciaba la grave situación del centro hospitalario que, por su especial interés para todos los vecinos de esta comarca, resumimos.
Y precisa Santiago: “La pérdida de población ha influido de forma determinante en la atención sanitaria que recibimos y así, desde hace mucho tiempo, el Carmen y Severo Ochoa sufre carencias importantes”.
El último desastre, cuenta, fue la no renovación de contrato a cuatro médicos del servicio de medicina interna. “Los motivos fueron de carácter interno, de sobra conocidos por los responsables que no hicieron nada por solucionarlo. Al final hicieron un apaño y han tenido que forzar a internistas del HUCA a cubrir esas bajas. El problema fue muy serio y no trascendió a la calle. La mala gestión fue la causante del desastre”.
Y sigue: “La plaza de cardiología ha estado durante mucho tiempo vacante y era atendida por los internistas. En estos momentos está ocupada por una cardióloga, pero tiene reducción de jornada por lo que sólo trabaja día y medio a la semana.
Para el firmante del artículo “no son estas las únicas deficiencias. Y continúa desgranando: “El hospital Carmen y Severo Ochoa tiene un urólogo que trabaja de lunes a viernes, los fines de semana no hay especialista, como tampoco los hay en los servicios de oftalmología y otorrinolaringología. Tres servicios solo cubiertos cinco días a la semana. ¿Quién cubre las urgencias de estos servicios? ¿Se les deriva al HUCA?
Para Santiago, “cualquier baja que se produce tarda muchísimo en cubrirse” y considera que “el área sanitaria II es, sin duda, la peor tratada de toda Asturias. Profesionales, no sólo sanitarios, son reacios a trabajar en el suroccidente, debido a la distancia con respecto al centro de Asturias, que no es tanta, si no al mal estado de las comunicaciones y especialmente a la escasez de servicios de todo tipo en estos concejos”. Y remata: “A estas cuestiones se unía, hasta hace poco tiempo, las pésimas condiciones de los contratos”.
Y abre el análisis de la situación más allá del Hospital: “La escasez de profesionales también afecta a los centros de salud. Así por ejemplo hemos visto a los vecinos de Navelgas protestar porque no se cubría una plaza médica y otra de enfermería. Los problemas para conseguir pediatra también son motivo de queja. Es cierto que faltan profesionales, pero el suroccidente queda siempre para el final.
Cuando a principios de año se hizo pública la plantilla orgánica del SESPA para Tineo se mantenían dos fisioterapeutas. La lista de espera para ser atendidos era en aquel momento de meses, llegando hasta el año. Había unos 180 pacientes provenientes de especializada esperando ser atendidos y unos 40 de primaria. Con dos fisios la lista de espera crece y crece y crece.
Ahora nos hablan de una unidad de rehabilitación de pacientes con ictus para el hospital comarcal y que más adelante este mismo equipo atenderá en Tineo. En fin”.
Para el firmante del artículo “la excusa – nunca mencionada, faltaría más– que provoca estas situaciones es muy clara: poca población. Esa justificación no escrita puede ser aceptada por quienes no viven aquí, pero es claramente una injusticia social.
Otro desaguisado más, explica, es el de la seguridad en el Hospital.”Han reducido la plantilla de personal quedando sin ella por las noches y en determinado horario de tarde. Así están y estarán hasta finales de mayo.
Y remata: “Desde la puesta en marcha del Hospital Carmen y Severo Ochoa han pasado un buen número de gerentes por él, la inmensa mayoría han sido meras marionetas de la consejería de Sanidad. Y termina con una autocrítica: “Hemos de reconocer que en escasas ocasiones hemos levantado la voz para reclamar una atención sanitaria adecuada, que además se nos había prometido. Desde el ámbito político municipal no han hecho nada, les resulta un tema muy complejo y del cual lo ignoran todo”