“A pesar de todo caminamos felices por donde el oso. ¡Leña!”
Marcos Verano: “Soy feliz y punto”
Terminada las “100 Millas por donde camina el oso” pensé efectuar un análisis de la misma, especialmente desde el punto de vista de la alta repercusión positiva habida en muy diferentes medios y lugares. Entre sí y cómo, me llegó la opinión efectuada en Facebook por Marcos Verano, opinión que me pareció mucho más fundada que pudiera ser la mía, especialmente por su cercana implicación y mi desconocimiento de ese deporte.
La considere´ interesante y aquí la reproduzco para que puedan leerla aquellos que aún no lo han hecho. Dice así:
“Soy feliz y punto. Fue un año muy complicado, pero los resultados están ahí… o eso creo.
Zancadillas, problemas, momentos tensos, dudas… y, por supuesto, también muchísimas cosas buenas… bastantes más que las malas y/o regulares.
Un año loco. Desde conseguir un recorrido que tuvimos que modificar decenas de veces para que nuestra carrera no fuese considerada un atentado ecológico o mordernos la lengua ante “noticias” totalmente tergiversadas y malintencionadas como esta última que rezaba “Hay un 100% de posibilidades de que se produzca un desagradable encuentro entre un oso y alguno de los atletas”, hasta la caída de patrocinios, nada nos hizo dudar de la viabilidad del proyecto 100 Millas y de la repercusión que traería, directa e indirectamente para nuestra comarca.
Todos los pequeños sinsabores del año quedan en el olvido cuando compruebas la implicación de más de 300 amigos/voluntarios que realizaron una labor intachable, con un trato a los participantes que, desde el momento de la recogida de los dorsales, hasta el aplauso al último corredor en cruzar la línea de meta, pasando por todos y cada uno de los avituallamientos o bases de vida, constituyen la mejor imagen de las 100 MILLAS POR DONDE CAMINA EL OSO.
Pido perdón de antemano, porque seguro que se me pasa alguien, a la hora de escribir esta “parrafadina”, son cosas de la edad, ya voy siendo algo mayor y se me va la pinza. Que nadie se sienta menospreciado, por favor.
Cuando echas la vista atrás a todo lo pasado durante los últimos meses, te das cuenta de que da gusto “gastar” cientos de horas en preparar esta fiesta, dejar en llanta tres pares de zapatillas recorriendo la comarca con Pepe, Rubén, Cristina, Richi, Ángel, Toño, César, Marquinos… desbrozar/acondicionar/limpiar/marcar caminos con “máquinas” del calibre de Alejandro, Mariño, Miguel, Luis Carlos, Santinos, José Luis… contar con las manos siempre dispuestas de Mino, Ana, Juanín, Laura, Súper-Saray… y gracias a ti por aguantarme y comprender que cuando me meto en un proyecto, a veces pierdo la noción del tiempo: te quiero Isa.
Y por supuesto y sobre todo, gracias Daniel Cuervo Linde, contigo a recoger erizos sin guantes.
Y ahora a dejarse de cuentos y a trabajar, porque ya empieza a hacerse hueco en las nubes la luz de las 100 Millas 2022.
¡¡¡Leñaaaaaa!!!”
Pues ahí queda