De cuándo y cómo los pueblos de Cangas tuvieron escuelas
Cangas en 1931. Colección del Tous pa Tous
Durante el periodo de gobierno municipal iniciado tras las elecciones del 31, en el que ejerció de alcalde especialmente Mario de Llano, el gobierno aumenta generosamente los presupuestos en educación especialmente los destinados a la creación de nuevos centros de enseñanza. El impulso también llegó a este concejo.
Fíjense: en 1.931 se crean las escuelas de Otero, Irrondo de Besullo, Trones. Monasterio de Hermo, Noceda, Corias, El Puelo, Carcedo, Portiella, Sillaso. La Castañal, Mendiello, Villaoril de Sierra, Parada la Vieja, Ridera, Fuentes de Corbero, Villarmental, Villaez, Piñera, San Juliano, Oballo, San Damías y Vega de Otero.
Pero no para ahí la cosa do saños después, en 1,933 aparecen las de Vallinas, Villagimada, El Pládano, La Pescal, Cerecedo de Besullo, Acio, Moal, Ridera, San Martín de los Eiros, San Martín de Sierra, La Regla, Limés, Posada de Rengos, Bimeda y Tebongo.
En principio la creación de escuelas dependía del ayuntamiento, pero debido a la precariedad económica del mismo hubo que solicitar el apoyo del Estado que concedió 20.000 pesetas por cada grupo de dos unidades y 10.000 para los de una.
Mas esta pujanza no afectó solo al concejo. En lo que a la villa respecta, en 1.931 se empieza a gestionar la creación de unas Escuelas Graduadas. En junio del año siguiente, el Estado concede 60.000 pts. para tal fin. Pero no llegan. Y entonces aparecen las aportaciones de particulares, como la de Marcelino Pelayo Barreiro que donó 25.000. Hubo problemas para encontrar lo solares, pero al final se logró del Conde de Toreno en la llamada “Huerta de Arriba” en su parte más cercana al Paseo por un precio, entonces considerado módico, de 15 pts./m2. Los frailes de Corias también contribuyeron ofreciendo las madera necesarias para construirlas, pero no gratis sino con una 25% de descuento sobre el precio del mercado. Se crearon tres unidades de niños y tres de niñas. Pero no llegaban dado el número de niños, así que en 1.933 se crean dos escuelas de párvulos con carácter municipal.
Es decir, en la Segunda República.