Cangas rompió la tarde y no pasó nada
Cangas rompió la tarde, y la noche… y no pasó nada.
Y lo hizo una y otra vez… y no pasó nada. Y subieron miles de voladores al cielo y cayeron otras tantas varas… y no pasó nada..
Algunos medios de comunicación estaban defraudados. No encontraban morbo por ningún lado.
Una explosión descontrolada se produjo en la noche del 14. Menos mal que fu el 14 y aún no habían llegado los representantes de los medios. Aun así ya pudimos ver al día siguiente como titular:
-“Un herido leve por por una expresión de pólvora en Cangas”. Una persona se había producido unos pequeños cortes por la caída de cristales rotos, pero fue suficiente para ser titular de prensa cuando éste debía de haber sido “Cangas abrió sus fiestas con tremendas explosiones de pólvora”.
Y llegó el día 15. Y el tronar de la pólvora en el cielo volvió a romper la tarde y la noche. Y hasta la mañana. Y no pasó nada.
Fueron capaces los cangueses de iluminar la noche haciendo bajar la luz del cielo a la tierra a la vez que tal parecía que el dios Thor golpeaba como un desesperado las nubes con su tremendo martillo. Y no pasó nada….
Y las peñas acompasaron el son de voladores, luces, palenques, carcasas y morteros cual si en el Prao del Molín se hubiese instalado una orquesta filarmónica sabiamente dirigida.
-Y se inició el concierto con un suave “piccicato” de los violines a los que seguidamente se fueron incorporando violas y violoncelos…Y en “moderato” lo hicieron oboes, flautas y clarinetes; máquinas de mecha lenta en un “crescendo” con “tempo moderado”. Y se iluminaba el cielo y comenzaba a alterarse las espumas del agua del Narcea y el Luiña…. Y la orquesta seguía aumentando su presencia en el entorno.
“Allegro ma non tropo”. Y otras máquinas se unieron al total tal cual lo hicieran las cuerdas de viento: saxos, trompetas y trombones en la orquesta.
“Allegro!, pasamos a “allegro prestissimo”. Y los compases se aceleran a ritmo alegre con golpeteos salpicando el cielo entre el lucerío. Toda la orquesta tomaba cuerpo en el concierto.
–Forte, forte. Y la percusión se incorporaba al todo. Y las tubas entraban al contrapunto de las trompetas. Y el director agitó su invisible batuta abarcando todo el prao y la orquesta arreció en su crescendo a la vez que la percusión se unía al todo que envolvía ya, no al Prao del Molín, sino a toda la villa canguesa.
Y las luces y las corcheas, y las explosiones y la blancas, y las ráfagas de candelinas y las fusas, se confundían en el cielo en el especial concierto que las peñas estaban ofreciendo, con tan solo sus medios económicos y humanos, a todos los cangueses y a cuantos a la villa se acercaron en esa noche… Y no pasó nada…
Y en la mañana del 16, la orquesta de pólvora volvió a su especial quehacer. Y sonaban explosiones en los montes que circundan la villa, y en sus barrios…y en sus calles… Y no pasó nada
Y avanzaba el día entre explosiones…. Y no pasó nada
Y en la tarde no una sola orquesta, sino más de cien totalmente conjuntadas ofrecieron su especial concierto de pólvora ante miles de personas…. Y no pasó nada
Y una redactora nacional con contrato precario e instrucciones de buscar morbo, empuñando el micrófono cual si de una maza se tratase, iba de aquí para allá en las almenas demando heridos y quemaduras que no encontraba…. No había pasado nada..
La TPA sí supo estar a la altura de las circunstancias con una plantilla entregada que cada vez conoce mejor Cangas y su idiosincrasia
Y llegó la noche. Y el concierto tomó un especial toque femenino que no por ello restó fortaleza ni armonía ni “tempo vibrator” al conjunto…. Y no pasó nada…
Y de nuevo los cazadores de “exclusivas morbosas” se quedaron con sus micrófonos y ordenadores vacíos. Todo había salido tan bien que no merecía la pena pregonarlo, venían a decir sus mentores.
Y así nos plantamos en la noche del 21 con nuevo concierto nocturno de cierre. Y la orquesta volvió a lucir en todo su esplendor. Y no pasó nada…
Y por si aún quedan incrédulos, aquí les dejó el vídeo de los últimos compases que cerraron esta actuación.
Y como pieza especial de cierre, la orquesta dedicó a todos un especial añadido el día de la Magdalena. Y no pasó nada…
Pero eso no interesa a determinada prensa ni tampoco a determinados agoreros locales.