CANGAS DEL NARCEA.- Con el sello de calidad canguesa
Los datos al respecto señalan que son pocas las ganaderías en Asturias que se dedican a la cría y cebo de bueyes para carne debido a que requiere un ciclo productivo superior a cinco años.
Por ello su carne es un producto escaso y muy cotizado en el mercado. Esta cría se convierte en una excelente alternativa para complementar con el ganado de cebo habitual en la región asturiana. Como muestra destacada señalamos Cangas del Narcea de donde recientemente partieron cinco bueyes que fueron sacrificados y comercializados por el Grupo Los Norteños y se pudieron degustar en los restaurantes Urrechu de Madrid. Como punto de unión, las raíces asturianas de algunos de los socios de ambas empresas.
En noviembre del pasado año, surge una maravillosa oportunidad de colaboración entre el Centro Experimental de Cebo de Cibuyo, propiedad de José Ramón Martínez (Suroccidente Agrícola, distribuidor de Biona) y De Heus. Dicha colaboración se basa en la producción de canales de bueyes de la mayor calidad para disponer de ellas en el mercado. La idea surge por iniciativa del propietario del citado centro de experimentación, que, ante el auge en la demanda de carnes de calidades excelentes, se lanza a la adquisición y engorde de varios ejemplares de bueyes, para su posterior comercialización.
Una vez planteada la idea, se comenzó con la adquisición de varios animales en la zona suroccidental de Asturias y en el norte de la vecina provincia de León, tres ejemplares de raza Asturiana y dos cruces de Sanabresa y Casín. Los ejemplares, castrados y cercanos a los cinco años de edad se introdujeron en el citado centro de experimentación para su alimentación y seguimiento, recabando todos los datos posibles que ayudaran a conseguir un producto de excelencia.
El equipo técnico de De Heus, elaboró un plan de adaptación y alimentación acorde para estos animales, con el fin de conseguir unas canales excelentes en cuanto a infiltración grasa, textura y sabor se refiere. Los animales fueron alimentados con forraje de calidad y un pienso compuesto en harina de Biona, de gran contenido en almidones. Tras un periodo inicial de adaptación y un cebo cercano a los 10 meses, los animales estaban listos para su sacrificio. Diez meses de cuidado y mimo para unas canales que rondaron los 490-630 kg de peso dependiendo de la raza.
Tras su sacrificio en el Matadero Madrid Norte, de San Agustín de Guadalix, y un periodo de maduración en cámara, se dio paso a su comercialización por medio de la conocida empresa cárnica Los Norteños, muy arraigada a Cangas del Narcea por el origen de sus propietarios.