CANGAS DEL NARCEA.- ¡Cuidado, el Catastro investiga!
La campaña iniciada por la Dirección General del Catastro hace tres años para detectar construcciones ilegales en Asturias continúa dando sustos a muchos vecinos de esta comunidad autónoma.
Desde 2013 y hasta mediados del año pasado, la campaña impulsada desde Hacienda ha permitido localizar más de 27.000 inmuebles ocultos. Y la cosa sigue ya que terminada esta primera etapa, en estos meses se detectarán muchos más. Otros 24 concejos serán investigados a lo largo de los mismos en busca de las citadas ilegalidades.
Hasta el 30 de noviembre de este año, la investigación se desarrollará en Allande, Aller, Bimenes, Boal, Cangas del Narcea, Carreño, Degaña, Gozón, Grado, Grandas de Salime, Ibias, Illano, Langreo, Mieres, Pesoz, Ponga, Quirós, San Martín de Oscos, San Tirso de Abres, Sobrescobio, Tineo, Vegadeo, Villanueva de Oscos y Villayón.
Según datos del propio Catastro, el fraude más habitual es el que se engloba en el apartado de reformas y cambios de uso (34%), seguido de ampliaciones y rehabilitaciones (33%), nuevas construcciones (29%) y piscinas (3%).
Para desarrollar este trabajo, el Catastro cuenta con un cuerpo de más de 2.300 trabajadores que inician el trabajo de campo con fotos aéreas (de drones o de satélite) y supervisiones sobre el terreno. Luego confrontan la información con la documentación de los ayuntamientos y al detectar el fraude se envía la carta al contribuyente alertándole del inicio del proceso.
Antes de llegar a pagar, se puede alegar. Las principales reclamaciones se producen, por ejemplo, por piscinas hinchables, pérgolas o barbacoas, inmuebles que, debido a las fotos realizadas por los drones, pueden dar lugar a equívoco.