COSAS DE XUAN: “Yo me quedo aquí para siempre”
(Publicado en el último número de La Maniega por R. MERA)
- Toy murrrio, Cuntapeiro. Díxome Azcárate que cerramos, que nos vamos, que saparecemos…
- Tal parece, Xuan. Han pasado 36 años y creemos que es el momento. Cada tiempo requiere sus narradores y el nuestro ya se ha quedado atrás.
- ¡Pero coño!, que sigan otros más jóvenes. Yo toy dispuesto a seguir con cualquiera, de alguna manera soy un tanto inmortal como tantos otros personajes
- Ya, ya. Intentarlo lo hemos intentado, pero no ha habido suerte. Los tiempos han cambiado y los jóvenes tienen otras prioridades como el trabajo remunerado, y tú ya sabes que aquí siempre se ha trabajado
- -¡Cagoentoloquesemenea!. O sea que nis de nis.
- -Nis de nis, Xuan. Y bien que lo sentimos. Yo también tengo una especie de congoja que me oprime y hace pasar ante mis ojos números y números y artículos y artículos…
- Ya ya Cuntapeiro. ¡Que de recuerdos!. Acuérdome perfectamente del día que llegué a estas páginas de la tu mano y de la de Neto.¿ Cuantas aventura hemos corrido!. El jodido Neto pillome en el Tres Peniques y me fotografió con su lápiz; claro que para disimular me puso tu pelo y tu boquilla del tabaco. Porque ¡anda que no fumabas entonces!
- Se nos agolpan sucedidos y anécdotas Xuan. Y discusiones, y diatribas políticas e historias de alcaldes y concejales; y de ferias y de cármenes, y de voladores y cafés y capilés
- Ya, ya, y de Azcárate y tú dándole al mahou y dejando las cámaras olvidadass o intentado abrir la puerta de casa con un cigarro. ¡Anda que no han tenido que aguantar Isabel y Maribel con LA MANIEGA como excusa!
- Tienes razón Xuan.¡ Lo pasábamos en grande hasta trabajando para el periódico o la revista. LA MANIEGA nos ha dado muchas cosas y dentro de ella han surgido grandes amistades como la mía y la del rojo de Patatoski
- Vas a faceme llorar, ho. No te pongas sentimentaloide. Yo no pienso abandonar. Vamos a ver: ¿Tu no sigues escribiendo en la Internechet esa, en “De acebo y jara”?. Pues allí nos seguiremos viendo. Y ahora vamos al Blanco a ver a Pepín que también ha sido testigo de muchas de nuestras, digamos aventuras, nocturnas.
- Tienes razón Xuan, nos seguiremos viendo en De Acebo y jara, pero ya no será lo mismo.
- Adiós Xuan
- Hasta siempre Cuntapeiro