BERZOCANA.- La foto y su pie: Aceitunas
Llegan con el inicio del invierno. Pasan del verde al negro de forma desigual y concitan conversaciones múltiples sobre calidad, precios, kilos, trabajo y fríos. Aunque han cambiado las cosas y aparecido redes, plásticos y mantas que se extienden en el suelo para facilitar su recogida, e incluso vibradores motorizados que sustituyen en parte al vareado tradicional, el trabajo sigue siendo duro e incluso, en mañanas de hielo y agua, penoso.
De otra parte anuncian aceites de calidad que cubrirán el consumo de muchas familias e incluso unos euros para reforzar la siempre débil economía de las zonas rurales. Ha llegado el invierno, es tiempo de aceitunas, almazaras y promesas de aceites. De mi infancia ha me queda el gusto de los “tostones”