Ocho años de un asesinato no esclarecido
Degaña, celebra el miércoles, día 25, el aniversario de la muerte de Sheila Barrero
Ocho años después del asesinato, la memoria de Sheila Barrero permanece en Degaña. El miércoles,día 25, aniversario de aquella muerte, las banderas del ayuntamiento ondearán a media hasta y se celebrará un pleno municipal en el que de nuevo y como vienen sucediendo años tras año se condenará lo sucedido y se pedirá la apertura de la causa archivada, según los jueces, por “falta de autor conocido”. En el caso tan solo hubo un único imputado, el leonés Borja V.G.
La Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Asturias emitió un auto en el que desestimaba el recurso de apelación interpuesto por la familia de la joven Sheila Barrero contra la decisión del juzgado de Instrucción de Cangas del Narcea, dictada el 22 de octubre de 2007, en el que decretaba el sobreseimiento provisional por falta de pruebas. La Audiencia Provincial confirmó la decisión del sobreseimiento del caso y el archivo de las diligencias. Los jueces no consideraron que los argumentos de la familia fueran suficientes, aunque precisan que el auto de sobreseimiento “no comporta el cierre definitivo de las diligencias” las cuales “podrán reabrirse si concurrieran méritos para ello”.
En los razonamientos jurídicos, la Audiencia considera que los indicios racionales de criminalidad existentes en relación con el joven leonés imputado B. V. G. a “lo más que llegan es a erigir sospechas” y “no se pueden apreciar motivos suficientes como para mantener una acusación contra el sospechoso”. En el auto en el que ordenaban el archivo se declaran como “no probados” los seis puntos básicos en los que se basaba la familia para instar la apertura de juicio oral al joven leonés hasta entonces imputado como único sospechoso. Así, uno a uno, tanto el magistrado como el fiscal desmontaban algunos de los argumentos que señalaban a Borja V. G. en la escena del crimen.
A lo largo de ocho folios consideraron que no se había podido probar que exista enemistad manifiesta entre la víctima y Borja por lo que tampoco se puede esgrimir este supuesto como móvil del crimen; la aparición de una bufanda en el vehículo que en un principio dio la impresión que iba a dar un vuelco a la investigación tampoco ha podido aportar pruebas porque aunque aparecen restos de la víctima y de un varón desconocido, en el auto concluyen que no pertenecen al imputado; en el caso de la pólvora en las manos del joven, Borja sostuvo siempre que había estado cazando el día anterior a los hechos y el juez sentenció que la aparición de la pólvora “no prueba nada” y por último aseguraba que tampoco se puede afirmar que Borja fuese propietario de ningún tipo de arma corta.
Nada que ver con los argumentos de la familia de la joven asesinada que considera que existen “motivos suficientes” para reabrir la causa y esto es precisamente lo que hoy se pedirá en Degaña.