BERZOCANA.- Villancicos junto al fuego (IV)
Hace unos días, con motivo de la publicación del villancico “Iban caminando”, dentro del ciclo de los de Adviento, una berzocaniega señaló que le gustaba más “Las tres borrachas” pero que solo sabía un par de estrofas. En la creencia de que puede haber más berzocaniegos en la misma situación les traigo hoy el citado romance que, aunque no es navideño ni se atiene a la temática típica, sí se solía y se suele cantar en estas fechas.
Como todos los romances su interpretación es muy lenta. Téngase en cuenta que en aquellas épocas lo que sobraba era tiempo en las largas noches de invierno junto al fuego y, al contrario de lo que ahora ocurre, no se aceleraba en las interpretaciones sino que, por el contrario, se ralentizaba lo más posible.
En este caso se hacía tónica cada tercera sílaba métrica y se arrastraba la vocal con toda intención y solemnidad:
– La`una diiiiice mirael pooote, mira quueeee…
En otros casos incluso se acompañaba de una mímica descriptiva.
LAS TRES BORRACHAS
Estas eran tres comadres
en un pueblo todas tres,
y para una comilona
se juntaron todas tres.
Que toma las otras tres.
Que tómalas del derecho,
Que tómalas del revés
La chica es la Inés,
Teresilla la del oro
y Mariquilla la del laurel.
Que toma las tres borrachas …
La una puso un pan de trigo
de cuatro libras o tres.
Un jamón puso la otra
de cuatro libras o tres.
La otra puso un pellejuelo
de cuatro arrobas o tres.
De que ya se emborracharon
todas miran al revés.
Que toma las tres borrachas …
La una miraba al cielo:
-¡Mira que paño francés!.
La otra mira las estrellas:
¡Cuántos realillos de a tres!.
Que toma las tres borrachas …
mira que redondo es.
Y la otra miraba al jarro:
¡Mira que niño sin pies!
Que toma las tres borrachas,
Que toma las otras tres.
Que tómalas del derecho,
Que tómalas del revés