CANGAS DEL NARCEA.- El juicio por los desprendimientos de Clarín será largo, complejo y muy técnico
Los vecinos de la calle Clarín de Cangas del Narcea afectados por el desprendimiento de tierra que se produjo el 22 de enero de 2013 se hallan ya a la espera de juicio. Esperanzados y, a la vez, preocupados.
Los propietarios de los edificios número 11, 13 y 15 de la citada calle Clarín interpusieron una demanda contra la constructora, el arquitecto y el geólogo que intervinieron en el proceso constructivo, a los que responsabilizan de lo ocurrido y a los que exigen la ejecución de las obras definitivas de estabilización y contención del talud.
En la audiencia previa al juicio, celebrada n el juzgado de Cangas del Narcea, se estableció la fecha para la celebración del juicio: será los días 3 y 4 de diciembre. El abogado de los afectados, Félix Lobato, se mostró “satisfecho” con el desarrollo de la misma argumentando para ello que “se ha admitido toda nuestra prueba, estamos contentos porque podré debatir con todas las armas”,aunque adelanta que el juicio será “complejo, largo y con un contenido técnico de mucho calado”.
Explicó también que “el constructor considera que todo cuenta con las licencias y autorizaciones del Ayuntamiento, que confió en los técnicos que había contratado y afirma que sí había un estudio geotécnico de la problemática del talud”. El arquitecto argumentó en la misma línea, sin embargo, el geólogo de la obra puntualiza y concreta de forma exacta cuál fue su cometido profesional en la obra, tanto en los bloques de la calle Clarín como en las viviendas unifamiliares de la calle Santa Bárbara. Y aquí reside uno de los primeros problemas a dilucidar: “no hay coincidencia entre lo que dicen arquitecto y constructora respecto de la encomienda al geólogo”, añade el abogado.
Precisamente por ello señala que “esto va a ser un punto importante de debate en el procedimiento, porque ya la contestación a la demanda por parte del geólogo y su informe pericial recogen que lo que a él se le solicitó como asistente técnico no es lo que dice ni la constructora ni el arquitecto”. Es por ello por lo que el abogado de los propietarios cree que “la discusión no va a ser a dos bandas, es decir los vecinos contra los técnicos y la constructora, sino que cada uno intentará defender que su postura profesional es la correcta”.
En la demanda los afectados piden que se aclaren las causas del desprendimiento, las responsabilidades y que “se dé una solución al problema que estas personas tienen detrás de sus edificios y que sea asumido por los responsables”.
Actualmente, la zona se encuentra en parte estabilizada por la obra de emergencia que el Ayuntamiento acometió con el apoyo económico del Gobierno del Principado. No obstante, los vecinos temen que la llegada del invierno y las lluvias puedan producir nuevos argayos.