SUROCCIDENTE- Amigo lector, ¿es partidario del usted o del tú?
Amigos que me leeis, ¿vosotros/ustedes son del tuteo o del usted? ¿Qué nunca se lo han planteado?, pues hágalo ahora conmigo.
Miren, no hace aún mucho tiempo, y sucede más veces de las que nos parece allá por esos mundos de dios, que solía decir mi abuelo Juan Luis en su pequeño pueblo extremeño, una profesora americana montaba un verdadero pandemonio al respecto al quejarse en TikTok de que sus alumnos españoles la llamasen por el nombre de pila, la tuteasen: Y no se crean: era una mujer joven, pero aun así consideraba una grosería este trato informal de sus alumnos españoles frente al resto que utilizaban académicamente el usted.
La de tutearse es costumbre que llama la atención de buena parte de los extranjeros que visitan España; pero no solo la de ellos, también entre nosotros. Hace unos cuantos años, el entonces Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, propuso la supresión del tuteo en las aulas, bajo el argumento de que contribuiría a un mayor respeto entre alumnos y profesores. Como era de esperar, la iniciativa no tuvo el menor éxito. En esto se conoce que España, como en tantas otras cosas, sigue siendo una excepción, “diferente “que dijo Fraga Iribarne en sus tiempos de Ministro de Turismo, pero en inglés
Los países del ámbito anglosajón e incluso algunos latinos como Francia e Italia usan invariablemente el tratamiento formal en sus relaciones; y reservan el tuteo para la familia y amigos. Y otro tanto ocurre en la mayoría de las antiguas colonias españolas de América, donde al señor, señora o señorita se le agrega a veces el tratamiento de licenciado, doctor, ingeniero o lo que corresponda. Lo mismo sucedía en España hasta mediado el siglo XX, más o menos. El lenguaje era entonces tan formal como el que aún se usa hoy en el resto del mundo: y ni siquiera resultaba infrecuente que los hijos tratasen de usted a sus padres y abuelos. Tal le sucedió a quien les habla e incluso a mi hermano, que cumplidos ya sobradamente los sesenta aún seguía llamando de usted a nuestra madre con la que siempre convivió. Incluso he vivido como mis hijos tuteaban a mis padres mientras yo seguía haciéndolo de usted.
En alguna parte he leído que hay quien atribuye la generalización del tuteo en España a la Falange y que la fórmula del “tú” fue impuesta a sus camaradas por José Antonio Primo de Rivera, que habría tomado a su vez la idea del fascismo italiano. Otras lo extiende también al comunismo con su fórmula de “camarada” que unos y otros utilizaron para todos sus miembros, aun cuando en uno y otro movimiento el autoritarismo era más que sobrado
Sea ello lo que fuere el uso de un tratamiento u otro responde a una mera cuestión de formas que poco tiene que ver con la política y menos aún con las ideologías. Fácil es comprobarlo en el Congreso de los Diputados donde las formalidades se llevan al extremo ya que los diputados se tutean en el bar para, seguidamente, señorearse unos a otros e incluso subiendo el tratamiento dos o tres peldaños hasta llegar al anticuado “señoría” cuando suben al estrado.
Ni siquiera los parlamentarios de Podemos, rompedores al principio en cuestión de vestimenta y peinado, se atrevieron a desafiar esta norma. Ninguno de ellos ha usado el “tú” o el “vosotros” para dirigirse a los bancos burgueses de enfrente.
Buenas tardes para ustedes, los de una bancada; y para vosotros los de la otra.