BERZOCANA 1223-2023

Por Fulgencio Rodríguez Mera

El año 1223, fue un año normal; empezó en domingo, según el calendario juliano que era el   que regía entonces.

NOTICIAS DEL MUNDO

-El Papa que estaba en la sede de Pedro era Gregorio IX, el cual ese  año promulgo una bula contra la brujería.

-En Francia, el 6 de  agosto  de 1223 era coronado Rey Luis VIII, apodado “el León”

-En Portugal era coronado Rey Sancho II apodado “Capelo” o  “El piadoso”

-El 31 de mayo, los mongoles derrotan a los rusos y Kiptchak en batalla del rio Kalka. Francia.

-El 24 de diciembre, San Francisco de Asís, colocaba en una ermita de Greccio, Italia, un pesebre (sin niño) con un buey y una mula, dando origen al belenismo.

Hoy se ha convertido en reclamo turístico, ya que existe un belén de cada nacionalidad.

NOTICIAS DE ESPAÑA

Reinaban en España:

-En León, Alfonso IX. Quien en este año 1223 intentara apoderase de la ciudad  de Cáceres no lográndolo hasta 1229,  tras el cuarto intento.

-En Castilla, reinaba Fernando III “El Santo”

-En Aragón fallecía el Rey Sancho I de Cerdosa.

Extremadura, estaba  baja el dominio árabe, hasta que en abril de 1229 Alfonso IX  de León reconquistara  para la cristiandad la ciudad de Cáceres y en la  primavera de 1230 se apoderara de la ciudades de Badajoz  y Mérida, en general de toda la parte oeste de la astral Extremadura.

LA INVASIÓN ÁRABE

Antes seguir con nuestra historia, y para entender  mejor el tema que nos ocupa, sería conveniente  retroceder  cinco siglos, entre los años 711 y 715  (hay baile de fechas ya  que los historiadores no  se ponen de acuerdo.)  

La península ibérica se debatía en distas guerras internas y sucesorias, el Califato Omeya, procedente del norte de África ganaba la batalla del rio Guadalete (Cádiz) donde  perdió  la vida el Rey  D. Rodrigo, comenzando así el  final del  reino visigodo.
Inmediatamente los árabes  se apoderaran de toda la península, excepto  de un rincón de Asturias donde se refugió  el Infante, después Rey, D. Pelayo.

BERZOCANA

Fue por esa época cuando se trasladaron los restos mortales de San Fulgencio y Santa Florentina procedentes de la Ciudad de Sevilla, donde estaban sepultados, para evitar posible profanación, los clérigos de Sevilla los dieron sepultura en las estribaciones de las Villuercas, estribaciones  de  la Cordillera  los Montes   de Toledo.

Así lo escribe en 1596 fray Gabriel de Talavera, monje de Guadalupe, y Prior que fue de este Monasterio, en un informe que le mando hacer el Rey Felipe II sobre la procedencia de las Santas Reliquias, con motivo del pleito mantenido con Murcia.

Desde tiempos romanos, y muy cerca de donde fueron escondidos los cuerpos                                                     de los Santos hermanos, existía un poblado romano, de gente pobre y humilde, dedicada a la agricultura y ganadería, (así lo acreditan excavaciones echas en los años 70 del siglo pasado)

Este fue y sigue siendo el medio de vida de aquel pueblo, cuyo nombre conserva la tradición como Nora Corsárea que luego se llamó Berzocana. 

EL HALLAZGO

Así, no es de extrañar, que el 26 de octubre de 1223, en plena sementera, un labrador cuyo nombre e identidad  desconocemos, ya que ni la historia ni la tradición  nos lo revelaron, se disponía con su yunta de bueyes a arar la tierra para sembrar. De pronto la reja del arado tropezó con algo duro, como si hubiera metido en algún peñasco debajo de la tierra, cosa fácil al estar cerca la sierra Par comprobarlo, el labrador fue a buscar azada y pala, para  cavar un poco y ver dónde y porqué se  había enganchado  el  arado. Pronto se da cuenta de que no era ni piedra ni peña, sino lo que perecía ser un sarcófago mortuorio. Le dio miedo y no lo abrió, fue al pueblo y dio cuenta a las autoridades. 

Éstas fueron enseguida y abrieron el sarcófago, encontrándose los restos   de dos personas; junto a ellos unos rollos de pliegos que acreditan quienes eran y porqué habían sido escondidos en este lugar.

Efectivamente aquellos eran los retos mortales de los bienaventurados Santos hermanos, Fulgencio y Florentina, hermanos a la vez  de San Leandro y San Isidoro, cuyas vidas se remontan a finales siglo IV y principios del V.

(Son nombrados  los tres  Obispos en  la plegaria eucarística de la Misa de rito hispano mozárabe)

Las autoridades, una vez convencidas de que el hallazgo eran reliquias de Santos trasladaron el sarcófago a la pequeña iglesia del pueblo donde fue colocado en lugar destacado al lado del Evangelio, es decir a  la derecha del altar mayor, detrás de una verja  de hierro, allí recibieron culto.

LE PLEITO

En 1593 llegó a Plasencia una delegación de Murcia, encabezada por el doctor Arco, canónigo de la Catedral, con intención   de llevarse las Santas Reliquias, alegando dos cosas: la primera, el derecho de residencia, por hacer nacido los Santos en Cartagena; la segunda, por no recibir el culto debido en una iglesia pobre y pequeña, de una diminuta aldea.

 Esto provocó un pleito que llegó a las más altas instancias judiciales de entonces. Berzocana, fue defendida por Trujillo, en la parte civil, por ser cabeza de partido  judicial, y en lo canónico o religioso, por Plasencia al ser  Berzocana de este Obispado.

Como falló el pleito a favor de Berzocana, Murcia apeló al Rey Felipe II,  el cual tras pedir información en 1596 a fray  Gabriel  de Talavera,  monje de Guadalupe, tuvo a bien declarar válida la sentencia de tribunal de lo contencioso, que sería lo que es  ahora  el Tribunal  Supremo.

El Rey puso como condición que para callar a Murcia para siempre, le mandasen   cuatro hueso o canillas, así costa en carta que el mismo Rey envió  al concejo de Berzocana y conservada en el archivo de este Ayuntamiento. Una vez recibidas fueron mandadas dos a Murcia y las otras dos las mandó poner en el relicario del Monasterio de San Lorenzo del Escorial.

Así se canta en los Gozos.

Dejo la suerte divina, tres iglesias adornadas,

con las Reliquias sagradas, de Fulgencio y Florentina.

en ellas tenemos minas de milagros y favores.

Berzocana es la primera, la segunda el Sitio Real,

de San Lorenzo del Escorial, y Murcia que es la tercera,

cada cual fina se esmera en sus cultos y loores.

EL TEMPLO

Una vez terminado  el pleito con  Murcia, y siendo una de las alegaciones el no dar a las Reliquias  el debido culto, el pueblo prometió hacer una capilla.

Entre los siglos XIV y XV, los Obispos de Plasencia Pedro Ponces de León y su predecesor Diego  de  Carbajal inicia el uno y termina el otro el majestuoso templo que  ahora existe, y es semejante al de la Concatedral de Santa  María   en  Cáceres. Algunos  estudiosos lo atribuyen  al  mismo arquitecto.

La estampa de este Templo destaca sobre el pueblo por sus grandes dimensiones, ya que el eje este-oeste de la nave central mide  35 metros de largo. Todo parece indicar que fue levantado sobre otro de  origen visigodo de menores dimensiones,  todo quedo derruido a excepción de la torre, que es lo que ha se mantenido en pie del antiguo edificio.

LA CAPILLA

Pero   Berzocana, tenía una deuda pendiente con sus Santos, y así en 1610 se inaugura la  capilla mausoleo en que hoy se veneran. Esta fue construida únicamente por el pueblo y así como lo cantan las coplas del Ramo.

Para hacer esta capilla,

ni Rey ni Obispo ayudó,

porque aquesta ilustre Villa,

todo siempre lo cumplió.

Se trata de una capilla de dos pisos, en el de abajo se veneran las imágenes de San Fulgencio y Santa Florentina, de madera policromada, San Fulgencio revestido de pontifical, con capa pluvial, mitra y báculo. Santa Florentina, vestida con hábito benedictino y báculo de abadesa, ya que llegó a tener más de 1000 monjas a su cargo. Debajo de las dos imágenes y en pequeños relieves, están los tres Santo más de la familia, Leandro, Isidoro y el mártir Hermenegildo, hijo del   Rey Leovigildo, nacido del matrimonio entre éste y Teodosia, la quinta hermana de los Santos. Fue degollado por su padre por abrazar la fe católica frente al arrianismo. En el frontal de azulejos de la mesa del altar aparen otra vez las mismas imágenes, pero esta  vez acompañadas de    Teodosia con aureola de santa. Por detrás, una escalera  de granito, sube a la parte de arriba, como si fuera una tribuna.  Rodeada de una baranda de hierro se contempla un precioso arco triunfal bajo el cual una columna sostiene el sarcófago, tardo romano en el que fueron halladas las Reliquias, dicho sarcófago, está con la boca hacia  fuera, como un armario, dentro del cual un relicario de madera de ébano, nácar, marfil y oro, más conocido por los  berzocaniegos como el Arca de  los Santos. Este fue donado por el Rey Felipe II al término del pleito  con Murcia, y por haberle donado  las cuatro canillas. A los lados del Arca, dos relicarios de plata amarilla, contienen las cabezas de los Santos. Existe otro pequeño relicario de plata blanca que contiene el velo de la Santa. Según el libro de los milagros, un vez se desenrolló el velo sacándolo extendido en la procesión. Al dar a la tela la luz del sol, el velo se volvió nuevo, volviendo al su estado al entrar  otra vez  en  la iglesia.

CONCLUSIÓN

Este es nuestro legado, el que nosotros recibimos de nuestros mayores y que s debemos de trasmitir a nuestros hijos y nietos. Los Santos, (Nuestro Santos) están con nosotros no hace ochocientos años, sino 1310 si tenemos, en cuenta que fueron escondidos en estas tierras por el 713. Me gustaría recordar aquí la humildad de los dos Santos, ya que mientras que los otros dos hermanos Leandro e Isidoro se veneran en dos grandes catedrales y   ciudades, uno en la Catedral de Sevilla, el otro en la de León, estos dos lo son en un pequeño y escondido pueblo que muchos no saben ni que existe.

El Papa Francisco, a través de la penitenciaria apostólica  nos ha regalado el año jubilar. Reflexionemos un poco sobre la historia de los Santos, que es nuestra historia; Berzocana no se entiende sin sus Santo; ojala nuestro amor hacia ellos nos lleven en este año de gracia y de perdón al amor de Cristo y de su Iglesia.

ANTÍFONA

POR LOS MÉRITOS DE LOS SANTOS FULGENCIO Y FLORENTINA EL SEÑOR NOS CONCEDA LA SALUZ Y LA PAZ.

En Alcuéscar a 20 de junio de 2023 en la fiesta de Santa Florentina.