Ahora sí. De esta, lo de aumentar población está “chupado”
El consejero de Administración Autonómica, Medio Ambiente y Cambio Climático y vicepresidente del Gobierno asturiano, Juan Cofiño ha subrayado que el anteproyecto de la Ley de Reto Demográfico no impone a los ayuntamientos “nuevas obligaciones que los ciudadanos puedan exigirles“ sino que “únicamente pretende que incorporen a su acción de gobierno el punto de vista demográfico”.
Así lo ha afirmado en la presentación del texto de la futura ley que ha trasladado a la Federación Asturiana de Concejos (FACC). A juicio del vicepresidente, “solo remando todos en la misma dirección se logrará revertir a medio y largo plazo la tendencia y transformar la pirámide poblacional”.
Y aunque no tengo muy claro lo del “punto de vista democrático”, al igual que me ocurre con el de género, algo he entendido hasta aquí. Los que viene a continuación se lo dejo a mis lectores que, con mejor criterio, seguro que sacarán claras conclusiones de lo que tenemos que hacer (especialmente los gobiernos) para cambiar la tendencia demográfica de estos concejos y hacer que suba la población. Yo, amén de la grandilocuente palabrería, no he sacado nada en claro
Cofiño ha indicado que en las leyes sobre reto demográfico es usual combinar “dos importantes aspectos”, por un lado las medidas de coordinación de las políticas públicas dirigidas al fomento de la actividad económica y la inclusión social, y por otro, las tendentes a fomentar el aumento de la población. “Esta norma combina de forma equilibrada ambos aspectos”, ha dicho. ¿Me siguen?
Cofiño entiende que desde el ámbito local “se pueda ser reacio” a la aprobación de nueva leyes que supongan obligaciones económicas para los ayuntamientos que no vayan acompañadas de la correspondiente financiación, si bien ha considerado que “este no es el caso”, ya que establece que “no se modifica el régimen competencial de las entidades locales”.
¿Van entendiendo lo que tenemos que hacer y van a hacer ellos, no? Y además los ayuntamientos no necesitarán poner ni un euro.
Por el carácter transversal del reto demográfico, ha señalado también que se establecen líneas generales de actuación en los distintos ámbitos administrativos con la finalidad de que “puedan abordarse de forma coordinada todos los múltiples aspectos que inciden en la problemática demográfica”
Eso ya es otra cosa, digo yo
El anteproyecto, que se compone de 81 artículos, es una ley que se marca como objetivos principales (atiendan bien) “la orientación y la coordinación de la acción de la Administración del Principado y la pervivencia en el tiempo como una herramienta legislativa que trascienda las limitaciones propias de la temporalidad de las legislaturas y de los cambios de la composición de los gobiernos”.
Sí señor. Clarito como tienen que ser las cosas. Ya veremos cómo después de poner esto en práctica la población crece como la espuma en galerna cantábrica
Pero hay más. Ha dicho Cofiño que, además, esta Ley “busca marcar orientaciones generales y específicas en lo relativo a la atención a la población regional, sus necesidades y aspiraciones, el impulso a las distintas funcionalidades de los territorios rurales y urbanos así como la cohesión entre los mismos”. Así mismo contempla “la necesidad de disponer de una estrategia, una planificación y una programación demográfica entre todos los departamentos del Gobierno para buscar la transversalidad, la transparencia y las sinergias que surgen de las distintas políticas sectoriales que directa o indirectamente afectan a los asuntos demográficos”. Y todo ello si gastar un solo euro
Pues aquí paz y después gloria