Y Merce fue profeta en su tierra recibiendo el reconocimiento de sus vecinos
Un momento del homenaje
La profesora de canto, solfeo y piano por antonomasia y fundadora del coro infantil de Cangas del Narcea, Merce Otero, recibió el pasado domingo un cálido y emotivo homenaje en el Teatro Toreno de la capital del concejo lleno para la ocasión.
Hablar de música en Cangas es hablar de Merce Otero. A ella dedicó su vida y ella fue su pasión al igual que la enseñanza. Fueron muchos, muchos, los cangueses de todo tipo y condición que pasaron por sus aulas. Y fueron precisamente estos alumnos los que ha querido homenajearla para reconocer públicamente “una trayectoria impecable, vivía con una pasión que nos ha sabido transmitir que hoy (por el domingo)) estamos aquí para devolverle todo ese cariño”, señaló María Belén Menéndez Alba, una de su alumnas que actuó como portavoz de todos ellos.
Por su parte, la profesora agradeció con un sincero “muchas gracias” el homenaje recibido, que estuvo dirigido por Menéndez Alba y una de sus hijas.
Juntas recordaron su trayectoria profesional, desde los inicios con sor María Imelda, una monja del convento de clausura de Cangas del Narcea, para cuya labor docente, tal y como contó Merce desde su butaca, “hubo que pedir permiso al Papa”.
También recordó su hija su perfeccionismo y formación continua, “aplicando tecnologías muy novedosas para dar lo mejor a sus alumnos”. Tal era la precisión que buscaba en su propio aprendizaje, contó, “que acudía a clases con dos maestros de piano para abordar la técnica desde dos ángulos distintos”.
Las presentadoras del acto recordaron muchas anécdotas vividas como la participación del coro infantil en una competición del Colegio Mayor Asturias, en 1985, donde sorprendieron con un altísimo nivel.
Y aquel coro infantil sorprendió a Merce Otero levantándose sus miembros de entre el público y cantando juntos de nuevo.
Al acto también asistieron el concejal de Cultura, José María Álvarez, y el alcalde cangués, José Víctor Rodríguez, quien destacó que “aquellas personas que pasaron por tu docencia hoy está claro que las has marcado para toda una vida”.
Merce Otero recibió unos detalles y el regalo impagable de volver a ver a sus alumnos de aquel coro sobre un escenario.
Desde aquí nos unimos al homenaje a esta gran mujer.
