ALLANDE.- La Fiscalía acusa a un matrimonio allandés de un presunto delito continuado de estafa
Pola de Allande
El Juzgado de lo Penal número 3 de Oviedo acogerá el próximo lunes el juicio contra un matrimonio acusado de estafar 21.000 euros a una mujer de 75 años, que no sabe leer ni escribir y dependiente, unos hechos por los que la Fiscalía solicita para cada miembro de la pareja una pena de dos años y cinco meses de prisión.
El Ministerio Fiscal sostiene que los dos acusados se aprovecharon del estado de la víctima, que no sabe leer ni escribir y además presenta un deterioro cognitivo leve-moderado, así como un déficit visual importante y precisa de ayuda de terceras personas para la correcta administración de su persona y sus bienes; una enfermedad que, según la acusación, afecta parcialmente a su voluntad e inteligencia, careciendo de capacidad para la toma de decisiones económicas.
La acusada había sido la asistenta de la víctima cuando ésta residía en una localidad del concejo de Allande y, aunque ya no le correspondía atenderla desde 2014, continuaba su relación con ella hasta el extremo de que la mujer le entregaba 1.500 euros mensuales en la creencia de que eran para las labores de asistencia, cuidado y alimentación que realizaba y le entregaba 1.000 euros cuando tenía paga extra.
El matrimonio alquiló un piso en nombre de la anciana, en 2014, en Pola de Allande y convenció al propietario para que ésta abonara mensualmente 40 euros a cambio de realizar una serie de reformas en la casa, pero, según la versión fiscal, ni se documentó el contrato de alquiler, ni se estableció por escrito la obligación de la víctima de pagar reforma alguna, ni tampoco fue informada de su coste era a cambio de vivir en la vivienda.
Así, aproximadamente entre noviembre de 2014 y enero de 2015, los acusados comenzaron a realizar una serie de obras o trabajos «indeterminados, indefinidos e inespecíficos» en la casa que eran realizada por el marido por un importe de 17.790 euros, si bien la acusación mantiene que no hay ni documento técnico alguno, ni licencia municipal, ni presupuesto previo, ni contrato entre las partes con sus derechos y obligaciones.
Tampoco figura el importe total o mensual que tendría que pagar la parte contratante, ni plazo de ejecución, ni qué parte correspondería pagar en su caso al propietario de la vivienda al igual que se desconoce el estado que tenía la vivienda antes de su realización.
La víctima siguió entregando a la acusada los 1.500 euros al mes en la creencia de que esa cantidad era destinada a atenciones personales y, según la Fiscalía, los acusados se quedaban unos 350 euros al mes hasta que, en enero de 2020, la víctima descubrió el engaño y les denunció.
La Fiscalía imputa al matrimonio como presunto autor de un delito continuado de estafa y alternativamente solicita que se le condene por un delito continuado de administración desleal.
Asimismo, pide que los acusados indemnicen a la víctima con 21.000 euros correspondientes a los 350 euros al mes que abonó durante 5 años.
