¿Y si en vez del ganado aparece muerto un oso?: ¡La de mi madre!
Una de las reses semidevorada
-Si llega a aparecer muerto un oso aquí se monta la de mi madre. Como son nuestras las reses que mueren, aquí nadie viene a vernos, ni a escuchar la problemática que tenemos. Si fuese un oso, lo que te digo, aquí estarían las teles, y las radios, la prensa, los ecologistas, los guardas, la Guardia Civil… y hala, todos a cargar contra los vecinos de los pueblos.
Los paisanos están cabreados. Cuando no es el lobo, es el oso; el caso es que un día sí y otro también andamos a las vueltas con los animales que unos y otros nos matan, argumentan. Y es que, amén de cabreados, están dolidos y cansados
-Los responsables nos ningunean, no nos creen y todo son trabas a la hora de reclamar daños. Dan ganas de hacer el petate, marcharse con viento fresco y dejar que vengan a cuidar las tierras y el monte los ecologistas que son, al parecer, los que saben de esto
Y es que en apenas a unos días del ataque de los lobos en Trones, Trasmonte y otros pueblos del concejo, dos ganaderos , José Luis García y David Manunca, han denunciado el ataque del oso a sus caballos en la zona de Besullo, concretamente en Cubo del Puerto. Tres yeguas, una de ellas embarazada, y dos potros, han sido las víctimas de este ataque.
Y se alarman unos y otros vecinos. “Llegan hasta las casas de los pueblos”, denuncian de un lado a otro del concejo, de los concejos de la comarca. Este ataque ha sido apenas a 300 metros de las viviendas y aseguran que ven pasar a diario las osas con sus crías. De alguna manera, denuncian, hay un sentimiento de impotencia, de sentirse con las manos atadas por la Administración y el exagerado sentimiento proteccionista
Aseguran que los ataques se han multiplicado y critican las indemnizaciones que reciben por los daños. “Te pagan poco y mal y si los animales no aparecen no cobramos nada”, explica Manunca, aunque podría fírmalo cualquier ganadero de la comarca.
Pero así las cosas, hete aquí que el presidente del Fondo para la Protección del Fondo Salvaje, Roberto Hartasánchez, cuestiona el ataque denunciado por los dos ganaderos cangueses y asegura sin ruborizarse que “es mentira” y que se trata de “una estrategia de ganaderos sin escrúpulos para cobrar los daños por las muertes del ganado que ocurren por causas naturales”.
O sea y en Román paladino que nuestro ganaderos mienten y tratan de engañar para cobrar. Y remata asegurando que en 38 años que llevan trabajando con osos jamás han identificado un ataque de osos a tres yeguas.
¿Por cuál de las dos versiones creen ustedes que se inclinará la Administración?
Es la historia que se viene repitiendo desde hace ya demasiados años.