Tiempo de huertos y… huertas
Hemos entrado de lleno en tiempos de huertos… y de huertas, añadiré, no sea el demonio que el “monterismo”, de Irene la ministra, claro, me ponga en su punto de mira. Aunque en este caso, y estando en Asturias como estamos, tampoco desentonaría mucho que dijese aquello de: huertos, huertas y huertes.
Ha llegado el tiempo en que muchos de nuestros jubilados, especialmente, abandonan la galbana invernal y sacudiéndose la pereza que imprimen manta, tele y sofá, se lanzan al campo dispuestos a dinamizar la economía agrícola diga el virus coronado lo que quiera. Y caminan hacia cualquiera de los puntos cardinales en busca del rincón de tierra, que de una u otra forma han conseguido, dispuestos a limpiar, cavar, roturar, sembrar y, sobre todo, comentar con unos y otros la situación, las ideas, el rendimiento, y los más que buenos tomates que cada uno va a tener este año .
-Hasta luego Pipo, ¿ya vienes del huerto?
-Bueno, en realidad yo tengo huerta, y sí, de irla preparando vengo.
Me quedé un tanto parado. ¿Cuál será la diferencia entre huerto y huerta?
Recuerdo que allá en mi niñez, los huertos eran pequeños y, en general, estaban muy ceca de los pueblos. Las huertas, por el contrario, tenían bastante más extensión y daban cabida a muchos más productos. Generalmente no dejaban de producir en casi todo el verano. Bueno, así lo deducía yo del hablar de los huertanos que a ello se dedicaban y, en aquel entonces, más por necesidad vital que por entretenimiento de jubilado.
Nada más llegar a casa me fui al diccionario:
Huerto: —-Terreno de corta extensión, generalmente cercado, en que se cultivan verduras, legumbres y árboles frutales.
Pues no iba yo tan descaminado.
Huerta: Terreno de mayor extensión que el huerto, en que se cultivan verduras, legumbres y árboles frutales.
También tierra de regadío
Queda claro, la única diferencia entre huerto y huerta es pues la extensión, y ustedes me desmentirán si a ello ha lugar, pero en estas cercanías son mucho más abundantes los huertos que las huertas; y más los aficionados que los huertanos profesionales.
Buena temporada