ENCLAUSTRADOS XXXV.- Todos promocionan
Viernes día 17.- Otra vez hemos amanecido con niebla. He perdido ya la cuenta de los días que así ha sido. Y también como en días anteriores, tras mojar las calles y tejados, se ha retirado hacia los altos tornándose en nubes. Queda el día oscuro y cerrado. Es manifiesto: ha aumentado un tanto el tráfico como el ir y venir de las gentes por las calles. Así lo cuentan desde uno y otro barrio. Quizá por ello mañana sábado, miembros del ejército patrullarán por esta zona y por Ibias para ayudar en las tareas de control tanto a la Policía Local como a la Guardia Civil.
He iniciado mi paseo y repaso lo que está aconteciendo con la educación mientras voy y vengo. Dicen los políticos responsables que no habrá aprobado general pero que “salvo excepciones muy especiales”, se pasará de curso. Papel de celofán pare envolver la realidad con palabrería hueca y dirigista. Pero tampoco especifican. No definen con cuántas asignaturas se pasa o no. Lo intentaron hacer, pero enseguida se les echaron encima los gobiernos vasco y catalán, ellos no aceptaban nada; dictarían sus propias normas. Y claro, detrás fueron los gallegos y algunos más, así que en cada lado se pasará con más o con o con menos “ya asegún ya como”, que decía Xuan. Todo patuleas dialécticas de la improvisación: al final pasarán todos los de Primaria y Secundaria, y quizás también los bachilleres salvo los de Segundo; con éstos y con la EBAU ya se verá Lo de las Universidades es otra historia.
Quiere el sol asomarse a la villa pero no lo consigue, como tampoco consigo, ni creo que tampoco vosotros, cargarnos de positivismo para encarar animosos lo que nos queda que, me da la impresión, no va a ser poco. Y cuentan en las Redes, y de ello se hace eco la emisora local de Onda Cero, que están revueltos los de los huertos, esos que cada año por estas fechas se lanzaban a poner en marcha sus pequeñas tierras para sembrar la patatas, cebollas, pimientos, tomates, calabacines…aunque fuese alquilando los terrenos en los alrededores de las villas ya fuera en Cangas o en Tineo. Pues no, no habrá huertos de este tipo. No tendrán problemas en los pueblos ya que la mayoría de ellos los tienen casi en la cocina de casa. Y tampoco corren el riesgo de cruzarse con nadie. No lo tenían ya antes de la pandemia, así que menos aún ahora.
Poco después de acabado el paseo me pongo a hilvanar estas líneas a las que no logro dar cuerpo ni mantener con ellas un hilo narrativo coherente. Quizás sea cosa del enclaustramiento, o de las noticas que me embarullan y desconciertan. Ni siquiera los diversos departamentos oficiales con el Gobierno a la cabeza son capaces de aproximar las cifras de muertos que ya están en las 20.000 y de las que parece no queremos ser conscientes. Preferimos montar cada tarde fiestas de ensalzamiento individualista del artista de cada barrio que asumir lo que está ocurriendo con coherencia y actuar así en consecuencia. Un rayo de sol se cuela y se refleja en mi teclado.
Al iniciarse ya la tarde, el día sigue oscuro y feo. Hoy se ha perdido la primavera y pasan los paraguas por la acera de enfrente. Curiosamente todos los estacionamientos de la calle están cubiertos.
Paciencia y feliz jornada