IBIAS se quedará sin matadero: La propaganda y los hechos
Los programas, ideas, avances, propuestas, estudios, propensiones y palabrería sobre la España vacía (vaciada dicen los más puestos) se suceden día tras día y llenan la boca de políticos y politiqueiros. Pero a la hora de la verdad todo es distinto.
Algo así, aunque no lo haya expresado tan meridianamente claro debe de haber pensado la alcaldesa de Ibias, Gemma Álvarez, cuando la administración les ha requerido la adaptación de su matadero “a la normativa vigente”
A este respecto, la alcaldesa solicitó el pasado martes al director general de Salud Pública, Rafael Cofiño, la necesidad de adaptar la normativa de mataderos de excepción permanente a la realidad de zonas como Ibias que, a partir de enero, se verá obligada a equiparlo a las grandes instalaciones.
Explica la alcaldesa que “se les exigen una sala habilitada como laboratorio en el matadero o enviar las muestras a un laboratorio de referencia”, laboratorio con el que evidentemente no cuentan. No ocultó su decepción al respecto y si expresó su frustración ante el Principado que alegó que para que el matadero siga y sea considerado como “una excepción” habría que solicitar a Europa precisamente esa excepcionalidad. Y remató: “No hay una mínima sensibilidad por estos casos. Veo el matadero cerrado”.
Y tan solo situaciones como ésta me llevan a admitir lo de “España vaciada”. Y lo es en cuanto la han vaciado políticos de todos los partidos y cataduras. Si está vacía es porque alguien la ha vaciado.