La foto y su pie.- Nieblas y vacíos
La quietud y el silencio han quedado atrapados entre la niebla. Pequeñas gotas de agua cuelgan temblorosas de las hojas y cables que afean el paisaje pero aportan bienestar.
El sello de los años ha avejentado los edificios que apuntan un abandono, si no de uso, si de ausencias. Se bifurcan los caminos vacíos buscando quizás rellenos de pisadas o recuperación de las perdidas por ausencias de vida o de necesidad. Diluye la niebla contornos y aporta el tiempo silencios y olvidos. Lo que fue ya no es. Se agotan los pueblos astures entre nieblas de olvido y de gritos de niños. Ni siquiera se oyen, más allá de los caminos, las chuecas de las vacas.
La niebla acrecienta los vacíos
