CANGAS DEL NARCEA.- ¿Fue Narcenatur un éxito como asegura la organización?. Lo dudo
He dejado pasar un par de días para no dejarme llevar por la primara impresión. Y me decido a escribir estas líneas después de hablar con unos y otros sobre lo que ha sido este año Narcenatur.
No me explico como la concejala de Turismo, Begoña Cueto, ha declarado con tanta naturalidad que “Narcenatur se ha clausurado este año con un balance más que positivo”. ¿Hablaremos de la misma feria?
Y añade: “lo que ha contribuido a optimizar la imagen del certamen ha sido su cambio de ubicación y la propuesta de numerosas actividades paralelas dirigidas a todos los públicos”. Para mí que la ubicación aquí o allá no incidió absolutamente en nada por cuanto para poder valorar el cambio hubiese sido necesario la asistencia de público suficiente para poder calibrar objetivamente la incidencia.
“No obstante, la nueva localización de la feria se quedó pequeña para albergar a todos los expositores profesionales interesados en participar y el Ayuntamiento ya está pensando en una solución de cara al año que viene”. ¿Pero cómo?. Los expositores ubicados en Maestro Don Ibo dejaban sitio más que suficiente para colocar otros tantos. Y en cuanto a la estética, y colocados en el centro, hubiesen quedado mucho mejor con vertiente a dos aguas. Abiertos tan solo a un lado no era precisamente una sensación “muy especial” por cuanto, si bien por una lado presentaban el mostrador al viandante, por el otro lo hacían con la culera. Fernández Uría estaba prácticamente vacía. Igual ocurría con la Calle Mayor que desde el Teatro Toreno a la Plaza de Asturias estaba igual. Apuntemos también que el hecho de que el sábado hubiese también el tradicional mercado en La Oliva lo que contribuyó a dar una sensación de mayor número, sensación que desapareció totalmente el domingo.
Pero dejémonos de detalles. Se equivoca totalmente la concejala al calificar la feria como un éxito. No lo fue en absoluto. Salvo hechos puntuales de asistencia, la falta de público fue más que notoria especialmente a la feria en sí. Fe de ello dieron los expositores que se quejaron amargamente del poco negocio habido. Y otro tanto le pasó a la hostelería que tan solo registró “especial movimiento” en la mediodía del sábado y únicamente en un tramo corto y concreto de la Calle Mayor. No sé qué ocurría el sábado en los bares de copas, pero el resto comenzó a cerrar apenas apuntada la media noche ante la falta de clientela
¿Se considera un éxito que tan solo un promedio de cien personas por sesión acudirá a ver el documental Cantábrico? En los tres pases sobraron butacas.
Y de nuevo aporta la concejala un dato: “Las actividades complementarias propuestas tuvieron buena aceptación, con una media de una quincena de participantes”. ¿Quince participantes por actividad se considera un éxito de asistencia y buena acogida?. Y en algunas si bien hubo alto número de participantes, desaparecieron nada más terminar las mismas.
Y en cuanto a las actividades infantiles señalan que en al taller de flores participaron unos cien niños y en los otros unos 70. Ciento setenta niños, o doscientos si lo prefieren, sobre un total de unos 1.300 en edad escolar.
Respetando todas las opiniones, creo que Narcenatur comenzó su decadencia en el momento en que abandonó La Himera y con ello el concepto global y aglutinante con el que nació, especialmente el de proyección al exterior luchando incluso por abrirse paso a nivel nacional. Esta última edición, incluso a nivel regional, fue eclipsada por otras ferias como la de Vegadeo con mucha más proyección informativa en general y comercial en particular. Y no digamos de la de Muestras de Tineo
No dudo en absoluto de la importancia del campeonato de perros de rastro o de la Pasamontes. Tienen mucha, pero su organización es ajena a la feria y, aunque se incluyan en la misma, este dato ha de tenerse en cuenta al igual que en el Carmen se hace con las actividades de Artesanos y las Peñas que son ajenas a las municipales.
Narcenatur necesita de un cambio total de concepto, de organización y de proyección. Y a partir de aquí usted, amigo lector, tiene todo el derecho a discrepar de estas opiniones.
NOTA.- Las fotos que se publican fueron tomadas todas en la mañana del domingo de doce y media a una de la mañana.
