CANGAS DEL NARCEA.- La foto y su pie: El puente y el tiempo
Bajo el puente de Ambasaguas, cambiante y eterno, se adivinan las lavanderas canguesas. Yedra y hierbas reflejan sensación de abandono en el perfil del arco. El palacio de Toreno luce limpio de sombras y el convento aún conserva su intimidad urbanística. Lo que será el futuro se intuye ya en el edificio que se está levantando. Las casas reflejan ruina y pobreza contenida. Tanto, que los ríos solo necesitaban un arco.