CANGAS DEL NARCEA.- La foto y su pie: Dejando pasar el tiempo
Ha dejado a sus espaldas las rejas del tiempo, del miedo y de la libertad. Sus manos, libro de trabajo y quizás de penurias, se autoacariacian con mimo suave sin detectar las ásperas rugosidades que han dibujado los años. Su mirada ya no sueña nuevos horizontes. Su cuerpo se deja relajar por el paso de las horas que el reloj de la Colegiata desgrana una a una sobre su cabeza. Tempus fugit