IBIAS.- El acusado por un incendio forestal en Ibias no ingresará en la cárcel ni hará frente a las sanciones por insolvencia. La fiscalía retiró la acusación sobre el otro implicado
En apenas una hora se resolvió todo lo referente al incendio habido en Ibias en 2012 que ahora se juzgaba. El Ministerio Fiscal y el abogado de los dos imputados por el citado un incendio forestal en agosto de 2012 J. D. y R. P,,gallegos, se enfrentaban a una pena de ocho meses de cárcel, multa y el pago de una indemnización por los daños y perjuicios ocasionados por el fuego que arrasó unas 240 hectáreas en terrenos de Asturias y Galicia, así como por el coste de los trabajos de extinción.
La Fiscalía retiró la acusación a J. D., mientras que R. P. aceptó una pena de seis meses de prisión por un delito de incendio forestal por imprudencia grave, una multa de 1.080 euros y el pago de las indemnizaciones previstas a Bomberos de Asturias, Principado, Xunta de Galicia y Ministerio de Agricultura, que suman más de medio millón de euros. Lo que iba a ser una mañana de declaraciones en el juzgado con la presencia de unos doce testigos se quedó en un acuerdo.
Según explicó su abogado, Marcelino Suárez, R.P. no ingresará en la cárcel al carecer de antecedentes penales. Tampoco hará frente a la deuda ya que es «insolvente», lo que se conoció tras las averiguaciones patrimoniales llevadas a cabo por la Fiscalía.
El citado mantiene su inocencia y asegura que “lo que se ha hecho es un atentado, las colmenas estaban en un camino público, con acceso a todo el mundo, siempre las tuve porque me gustaban y eran para la familia y llevaba años atendiéndolas”
Según la Fiscalía los hechos se remontan a la mañana del 13 agosto de 2012 cuando, tras haber estado extrayendo la miel de unas colmenas en la zona de La Cortina, los imputados dejaron el ahumador con el que habían estado trabajando sin apagar, «infringiendo las más elementales normas de cuidado, pese a ser conocedores de que la zona está próxima al lugar de interés comunitario de Los Ancares-Couriel y a la Reserva de la Biosfera de Los Ancares Lucenses y Montes de Navia».
Ayudado por el viento, el fuego se extendió por el monte colindante, afectando a zonas de los pueblos de Sena, Barca y Salvador, y de Ribeira, en Galicia. El incendio fue extinguido la mañana siguiente. Para las tareas, se movilizaron equipos de Ibias, Cangas del Narcea, Tineo, La Morgal y Lugo. E intervinieron cinco helicópteros, 7 agentes forestales, 20 brigadas de tierra, 11 vehículos contra incendios y medios del Ministerio de Agricultura. Los gastos superaron los 330.000 euros.