CANGAS DEL NARCEA.- Santa Bárbara ayer y hoy. De 2014 a 1.981
Mañana es Santa Bárbara, patrona de los mineros y del cuerpo de Artillería del ejército. Aunque no como antaño, su festividad se sigue celebrando en las comarcas mineras y entre ellas en esta del Narcea. Es curioso que tras un período en que estuvo a punto de desaparecer, la festividad resurgió con fuerza cuando las minas entraban en crisis y aumentaba el número de prejubilados a la vez que bajaba el de activos. Hoy en día es la presencia de estos prejubilados la que la mantiene viva. Es de agradecer la labor de un grupo de ellos, los componentes de la Sociedad de Festejos de Santa Bárbara, que vienen dedicando su tiempo y esfuerzos a mantener la memoria minera viva a través de esta celebración.
Mañana arrancan las celebraciones con una verbena amenizada por la Orquesta Waykas y Lucía y su acordeón. Antes, a las seis y media, tendrá lugar la procesión de la patrona escoltada por los mineros con sus lámpara encendidas. En el Parque del Minero tendrá lugar una ofrenda homenaje y, seguidamente, una descarga de voladores. Al terminar un pincheo para todos los participantes
Pasado mañana, viernes, la verbena estará amenizada por la música de Vivians y Dani y su acordeón.
Para aquellos más nostálgicos quiero traer aquí la reseña de la celebración en 1.981 publicada por quien esto escribe en La Voz de Asturias. En aquel entonces la Hermandad de Mineros “Santa Bárbara y San José Obrero” (entidad declarada de utilidad pública) era la responsable de la organización de las fiestas.
Este fue su programa:
Jueves, día 3.- A las ocho y media de la tarde concentración de los devotos y asociados a la Hermandad en la Plaza de la Iglesia para proceder a la tradicional procesión nocturna hasta el patio del Ayuntamiento donde se celebrará la Santa Misa, aplicada por los fieles difuntos, con la intervención de la Polifónica Coral canguesa, retornando el desfile procesional al templo parroquial por el recorrido habitual. A las diez de la noche verbena amenizada por la orquesta “Los titanes”, de Marta de Ortigueira (La Coruña) y la actuación de l agrupación regional “Los Ruiseñores de Bañugues” para finalizar con las tradicionales y sabrosas sopas de ajo.
Viernes día 4.- A la una de la tarde, Santa Misa conmemorativa de la festividad de la patrona precedida de la alborada callejera a cargo del grupo de gaitas “Costa Verde”. Al final, actuación del grupo “Trasmonte de Noceda”, cantando y danzando el famoso “Ramo de la Magdalena”, estampas que será filmadas por TVE y recogidas por la radio y prensa de la región. A las siete y media, en el Cine Trébol, función de teatro cómico regional a cargo de los populares humoristas Donorino García y Clara Ferrer que pondrán en escena “El gallo de la Quintana”, “Los amores e Ximielga”, “Herencia del mío padre” y “P´a Buenos Aires en burro” interviniendo para cerrar estos festejos diversos ases de la tonada astur que interpretarán las más populares canciones.
La historia
Según la tradición cristiana, Bárbara habría nacido en Nicomedia , cerca del mar de Mármara, hija de un rey de nombre Dióscoro, quien la encerró en una torre. El motivo del encierro pudo haber sido para evitar que los hombres admiraran su belleza y la sedujeran, o para evitar el proselitismo cristiano. Durante una ausencia de su padre, Bárbara se convirtió al cristianismo, y mandó construir tres ventanas en su torre, simbolizando la Santísima Trinidad. Su padre se enteró del significado del simbolismo de estas ventanas y se enfadó, queriendo matarla. Por eso, Bárbara huyó y se refugió en una peña milagrosamente abierta para ella. Atrapada pese al milagro, se enfrenta a su destino.
Fue atada a un potro de tortura, flagelada, desgarrada con rastrillos de hierro, colocada en un lecho de trozos de cerámica cortante y quemada con hierros al fuego. Finalmente, el mismo rey Dióscoro la envió al juez, quien dictó la pena capital por decapitación. Su mismo padre fue quien la decapitó en la cima de una montaña, tras lo cual un rayo lo alcanzó, dándole muerte también. Esta festividad se celebra el 4 de diciembre.
En la iglesia de San Juan del Hospital, en Valencia, se encuentra la columna donde fue martirizada, en una capilla bajo la advocación de la santa. Esta reliquia fue traída a la Ciudad de Valencia por la Emperatriz Constanza Augusta de Grecia
