Cuando al pueblo vecino veas los osos llegar….
Hace ya tiempo que los avistamientos de osos están proliferando en el suroccidente asturiano. Ha habido viajeros que han tenido que conducir carretera adelante tras sus pasos y otros, como ocurrió en la de Cerredo (AS-15), que se salieron de la carretera, chocando contra un árbol, ante el temor de atropellar a un oso. “Era miedo a lo que podía sucedernos si lo hacemos, atropellar un oso es gravísimo, otro cosa en un paisano” dijo posteriormente el conductor., reflejando el sentir de los vecinos
Pues bien, los vecinos de Pidrafita, en la vecina provincia gallega de Lugo, no podían creer lo que estaban viendo hace muy pocos días. Dos osos pardos se pasearon en la noche por el casco urbano de la localidad. Fueron varios los testigos que los vieron, entre ellos la Guardia Civil o el propio alcalde, el socialista José Luis Raposo que con gran retranca y en gallego decía así:
– “Eu chegaba dunha viaxe, sobre as nove da noite e atópome con dous `inquilinos´ diante da porta da casa, nada menos que dous osos. Isto cóntoo eu só e non me cren”.
La presencia de estos animales alteró el diario vivir de la localidad e hicieron que cundiera, sino el pánico, sí la preocupación. Cuentan que un vecino se los encontró al salir a la calle y a toda velocidad volvió a meterse en su casa. En principio no hay constancia de que los animales causasen ningún daño. Tras recorrer algunas calles tomaron la Rúa Observatorio en dirección al cuartel de la Guardia Civil, no sabemos si en busca de protección, donde se los encontraron dos agentes que iban en coche. Los guardias vigilaron de cerca a los osos durante un tiempo para evitar que causasen algún daño, hasta que comprobaron que tomaban rumbo al monte.
Según explicaron los testigos a diferentes medios, se trataba de dos ejemplares no demasiado grandes. Desde la Fundación Oso Pardo aclararon que este tipo de episodios entran dentro de la normalidad y explican que los osos pudieron acercarse al pueblo en busca de alimento, o simplemente porque les coincidía de paso y la zona estaba tranquila. En cualquier caso, matizan que no hay motivo de alarma pues probablemente se trate de un episodio aislado. La explicación no convenció mucho a los paisanos.
Con los pocos datos que manejaban desde la Fundación, explican que los osos podrían ser dos hermanos. Las crías pasan año y medio con la madre y en la primavera se separan de ella. Después, los hermanos pasan alrededor de un año juntos hasta que también se separan. Los ejemplares avistados en Piedrafita podrían estar en este caso.
Situaciones parecidas a la aquí narradas se han repetido también en otras localidades del suroccidente como Tablado, Bimeda, Gedrez, Cerredo, Larón y otras aldeas. Todo apunta a que el oso cada vez con mayor frecuencia y naturalidad se está acercando a los núcleos habitados. De momento sin ningún tipo de incidente
