El pintor cangués Federico Granell expone en la sala Gema Llamazares, de Gijón
Aunque en el concejo las cosas no van precisamente muy bien, los cangueses que trabajan esparcidos a lo largo y ancho del mundo siguen trabajando y dejándose ver, quizás muchas veces ante la indiferencia de sus propios paisanos.
Traemos hoy aquí al joven artista Federico Granell, natural de Cangas del Narcea, que muestra lo más representativo de su obra en la exposición “Love es blue”, que se inauguraba ayer en la sala de Gema Llamazares. La muestra podrá contemplarse hasta el próximo 9 de junio. Se trata de la exposición más completa que ha realizado el pintor cangués hasta incluyendo óleos, instalaciones y trabajos en vídeo.
Su visión cosmopolita del arte –ha residido en Londres, Roma y Milán y ha expuesto entre otros países en Santo Domingo o Méjico– ha contribuido a que los viajes sean una constante en sus exposiciones, mientras el paisanaje cobra una especial importancia en su tránsito por estaciones, andenes o aeropuertos, aunque él, particularmente, se siente más a gusto cuando llega a su destino.
Federico señalaba en una de sus múltiples comparecencias ante la prensa que se considera un pintor figurativo, muy basado en la fotografía pero sin pretender llegar a las calidades fotográficas, para lo que, precisa, ya está la cámara. El estilo ha cambiado poco a lo largo de su carrera, “más bien evoluciona según los temas que voy trabajando”.
A Federico le gusta trabajar por las mañanas “porque estoy más metido en lo que hago, lo veo todo más claro. También me gusta más el verano porque trabajo con luz natural y el invierno de Asturias es un poco oscuro aunque ya estoy acostumbrado. Supongo que es algo que se palpa en la pintura sin darnos nosotros cuenta”.
Todos los éxitos para nuestro paisano